4 i 5

informació obra



Il·luminació:
Ma Yue, Tao Ye
Vestuari:
Tao Ye, Li Min, Duan Ni
Companyia:
Tao Dance Theater
Intèrprets:
Tao Dance Theater, Trevor Carlson
Direcció:
Ferran Carvajal
Sinopsi:

Des de la seva fundació el 2008, TAO Dance Theater ha revolucionat el panorama de la dansa a la Xina. Creada i dirigida per Tao Ye el 2008, la companyia ha actuat en els més importants teatres i festivals d’arreu, des del Lincoln Center de Nova York fins l’Òpera de Sydney, i du a terme una funció continua en l’ensenyament de la dansa a la Xina. Des de 2012 és artista emergent associat del Sadler’s Wells.

El Mercat de les Flors presenta dues obres numerades d’una llarga sèrie en la qual el coreògraf Tao Ye segueix els seus experiments minimalistes: l’exploració del cos humà com a element visual desproveït de narració o de representació. A 4, els cossos semblen buscar-se els uns als altres mentre estan sent separats per una força invisible però consistent. A 5, contràriament, una força invisible manté els cossos junts en una massa indistingible, calidoscòpica.

Crítica: 4 i 5

10/10/2016

MERCENARIOS DE ILUSIONES

per Carmen del Val

La temporada del Mercat de les Flors arrancó, la noche del viernes,  con el perturbador,  hermoso y reiterativo baile de la compañía china de danza contemporánea, Tao Dance Teater, que visitaba por primera vez nuestra ciudad. La expectación era máxima y la sala MAC del Mercat se llenó hasta la bandera de un público que aplaudió la sabiduría e impecable técnica que emanaban los cuerpos de los bailarines de esta excelente compañía.

Esta formación presentó dos coreografías de su fundador y director desde 2008,  Tao Ye, ambas tienen como título un número ya que Tao afirma que no hay palabras para definir la danza. En es un escena totalmente desnuda con el  suelo blanco empezó el baile de la primera, titulada 4. Rebeldía, sumisión, orgullo y docilidad se entroncan en un magnífico baile desnudo, minimalista y ancestral. Los cuerpos de los bailarines rezuman filosofía milenaria y vanguardista a la vez. Su gesto  marcial y amenazante en ocasiones, se quiebra y se convierte en dúctil, según el ritmo de la magnífica música del compositor chino  de folck y rock, Xiao He, una de las mejores bazas del espectáculo. Sus melodías, la percusión y la cromática de su música cincelan los cuerpos de los bailarines en una comunión perfecta. Hay fragmentos de la música que abusan intencionadamente de la reiteración al igual que las frases coreográficas, ya que para Tao la reiteración es un ritual cotidiano del cuerpo humano. Son fragmentos que resultan irritantes y atractivos a la vez. Otro acierto de esta coreografía es el acertado vestuario de  Lin Min y del propio Tao. Los cuatro bailarines llevan unas amplias faldas pantalón negras que dan mucho juego visual y en sus cabezas lucen una especie de casquete militar. El antifaz que cubre sus rostros no permite conocer el sexo de estos mercenarios emocionales.

La segunda coreografía, 5, es muy diferente de la primera. Aquí sus cinco intérpretes están en el suelo que no abandonaran en ningún momento de la coreografía. Sus cuerpos forman una masa humana, lentamente, acompañados de nuevo por la excelente música de Xiao He, se van moviendo sinuosamente creando una escultura, un reptil o una pieza mecánica, según la imaginación del espectador. Esta masa humana no deja de girar por el todo el escenario mientras los piernas, los brazos y los torsos de los bailarines se entrelazan unos con los otros con una precisión matemática pero también con una sugestiva indolencia que transmite a espectador una armonía milenaria.