LA LEYENDA DEL FAUNO
“… y entonces el cielo fue separado de la tierra, los ríos de los mares y los animales de los hombres.
Pero en el caso de los hombres, tal separación no fue del todo posible. Razón e instinto, empezaron a convivir dentro de un mismo ser… Y este, cuenta el sabio de una antigua tribu, es el origen de la leyenda del Fauno.”
EL VIAJE
“… Tengo cientos, miles, millones de billetes, pero todos ellos en blanco, sin ningún destino… He visto el tren llegar e irse muchas veces, pero en mi maleta no hay más que sueños que nunca llegaran a cumplirse por no atreverme a tomar el tren.…”
(...)
La Leyenda del fauno y el viaje es uno de los primeros espectáculos de la compañía y eso se nota. Un pintor es seducido por la idea de crear un cuadro que cobre vida. Construido a partir de su personaje del fauno es un montaje totalmente multidisciplinar: voz, música, danza, clown y proyecciones.
Pero tanta multidisciplina aleja al espectador del todo, en una clara falta de coherencia. Entre sus múltiples peros está el uso indiscriminado de la voz en off, a falta de cohesión entre los escasos momentos de danza y clown, se opta por la narración descriptiva de lo que deberíamos ver con nuestros propios ojos más que oír.
Tampoco le juega a favor la cámara negra del Tantarantana, donde el diseño de iluminación de Sergio García queda reducido a la mínima expresión. Independientemente del color de las luces, que nunca llega a ser el correcto, más que iluminar crean unas molestas sombras que no ayudan a definir la escena.
Con menos de una hora de duración, el espectáculo está falto de ritmo, de impacto visual y de un discurso que cohesione todas sus partes más allá de los cuatro tópicos sobre el mundo pictórico que aparecen proyectados en la pared del fondo en forma de frases de ilustres pintores como Picasso.