La mujer más feliz del mundo

informació obra



Direcció:
Ángela Palacios
Autoria:
Natalie Ravlich, Carlos Be
Sinopsi:

Natalie Ravlich, coneguda fotògrafa australiana d’ascendència europea, es presenta davant del públic com a dona, anglesa i immortal. I no només això: També com la dona més feliç del món. Serà veritat?

La seva vida és plena de passatges estimulants, aventures per terres conegudes i ignotes, i moments vitals tan estrets com el filferro d’una funambulista. Fins i tot cau presa, com si fos una exòtica au, una au del paradís, d’un Barbablau barceloní.

La dona més feliç del món ens parla de la consciència que tenim de nosaltres mateixes, dels altres i del nostre entorn. També ens parla de fins on som capaços d’avançar tant soles com acompanyades, i com l’atracció dels oposats mobilitza aquest món cap al seu destí, un destí on totes i cadascuna de nosaltres participem.

Crítica: La mujer más feliz del mundo

14/10/2024

Una catalana venida de Australia

per Ferran Baile

Todo empieza en el vestíbulo, en este caso el de la coquetona sala La Badabadoc.

Un trapecio en el centro intriga a los espectadores antes de entrar. Espectacular, Natalie Ravlich aparece y colgada del trapecio con arriesgadas acrobacias nos da la bienvenida y saltando ágilmente tras este brillante aperitivo circense nos invita a seguirla.

Entramos en la pequeña sala y en el escenario vemos al fondo una estantería en forma de árbol, con diversos objetos. y una pantalla donde se proyectarán una serie de imágenes sobre Australia y su soberbia fauna, fotografías y fragmentos de películas y referencias televisivas. Destaca la soberbia escena, que se repetirá al final del niño aborigen montado a caballo de la espectacular película Australia (producida e interpretada por Nicole Kidman, coprotagonizada por Hugh Jackman y dirigida por Baz Luhrman-2008).

Natalie Ravlich, es una actriz y trapecista, con una gran capacidad de empatía, nos ofrece un vital monologo sobre diversos aspectos de su vida, autoficción en clave de humor, pero sin eludir aspectos ciertamente dramáticos.

Se declara, La mujer más feliz del mundo, porque ha estado más de cinco veces al borde de la muerte en diversos accidentes, desde ser atropellada por un coche cuando era niña y salir indemne, hasta ser atacada por un tiburón (más de cien puntos visibles surcan con cicatrices en sus brazos). Apunte practico, si eres atacado por un tiburón, la mejor defensa es darle un puñetazo en los ojos. Esperemos no tener que pasar por esta experiencia.

También menciona estas muertes en vida, como cuando le propusieron entrar en la competición para Miss Australia (muy divertida su parodia de estos concursos) o cuando padeció tras su matrimonio quince años de maltratos culminados con violencia física.

Su infancia en Australia

Natalie nos cuenta su infancia en Perth, la ciudad más occidental de Australia. Utiliza objetos, juguetes, cambios de vestuario y un teléfono, para comunicarse con su dramaturgo, que le irá dando instrucciones. Nos habla de las islas cercanas, el único lugar donde vive un peculiar y entrañable animal, Quokka del que luego os hablaremos. Nos cuenta sus peripecias en la escuela desde sus 13 años, aún con mentalidad infantil ella ya era alta y entonces gordita. Se enamoró del más bajito de la clase, de idealizado origen italiano (luego sabremos que fue de este primer amor). Nos habla de su padre cuidador de caballos, de su familia, de su abuela (Baba). Vemos imágenes de la azucarada familia feliz de una serie australiana cuya hija adolescente su familia identificaba con ella. Cosa que le enfurecía. Nos canta la canción que prendió su etapa juvenil, I can´t get out of my head, de Kylie Minogue. De sus viajes por el mundo, hasta su llegada a Barcelona ciudad de la que se enamora y en la que decide vivir para siempre.

Seducida por Barcelona

En Barcelona nace el sol y Perth, justo en las antípodas, es donde se oculta. Desde su llegada a Barcelona, procedente de Italia, donde tuvo un amor que la llamaba Spaghetti, se enamoró perdidamente de la ciudad y decidió quedarse. Aquí se enamoró perdidamente y se casó con un catalán bajito, actor mediocre (su pasión por los bajitos parece ser una norma). Le salió rana, peor aún, un maltratador psicológico primero, hasta llegar a la violencia física. En las escenas en que habla de esta turbulenta fase de su vida, demuestra unas apreciables dotes dramáticas. Este amargo trago que se llevó más de una década de su vida no influyó en su voluntad de quedarse a vivir en Barcelona.  

Natalie Ravlich, mujer de impresionante presencia, con sus casi 1.80 metros de altura, ahora sumamente esbelta, es de una simpatía arrolladora y nos enamora desde el inicio, llevándonos ágilmente de la comedia al drama, trasmitiéndonos siempre su mensaje vital.

Un espectáculo muy recomendable, fresco, comunicativo y estimulante, que merece tener tras su breve estreno en La Badabadoc un largo recorrido.

Un texto bien tejido y una dirección cómplice.

Partiendo del texto que escribió y que representó en Australia con una duración de media hora, ha ido perfeccionándolo con la ayuda del dramaturgo Carlos Bé y bajo la estimulante vigilancia de la directora Angela Palacios.

Carlos Bé (Vilanova i la Geltrú, 1974), ademáes autor, dramaturgo y director. Entre sus obras destaca Clarissa (estrenada en el 2023, en la misma sala), Llueven vacas, La fragilitat dels verbs transitius y Goodbye Barcelona (estrenada en el 2013 en la sala Flyard).

Angela Palacios, nacida en Logroño y desde hace quince años ubicada en Barcelona, es directora, actriz y dramaturga. Entre sus últimos trabajos están Grácias por todo (Sala Fènix, 2024), 200.000 mujeres (estrenada en La Badabadoc), Salve Regina y Mirta en espera (estrenadas ambas en la Sala Fènix) y Malparida (Espai Texas).

También contribuyen a enriquecer el espectáculo las imágenes y filmaciones del cineasta y realizador Ruben Rocha, que vive en Viena y la cuidada iluminaciónde Damian Iglesias.

 

Fotógrafa, viajera, trapecista y actriz

Natalie Ravlich es de profesión fotógrafa, reconocida internacionalmente. Desde hace dos décadas vive en Barcelona, Se formó en el teatro en la escuela Nancy Tuñón-Joan Oliver y en el mundo circense en la escuela Centre de les Arts del Circ Rogelio Rivel (Ateneu Nou Barris), especializándose en la técnica del trapecio. Su reciente trabajo como actriz ha sido co-protagonizando, La felicidad es un hábito, de la dramaturga Laura Freijo, en el Teatre Gaudí, este mismo año.

 

Los-las irresistibles Quokkas

Viven solo en las islas cercanas a la población de Perth, en Australia. Tienen el tamaño de un gato, el cuerpo de un pequeño canguro, son marsupiales peludos. Tienen un carácter muy sociable y la cara más simpática y contagiosamente sonriente del mundo. Es imposible no verlo en una fotografía y ya no digamos al natural y no enamorarte. Se les conoce como El animal más feliz del mundo.

¿Adivinan de donde surgió el título de este espectáculo?.

 

Texto : ferranbaile@gmail.com