Mira mamá, soy cabaretera

informació obra



Autoria:
Oriol Vila
Direcció:
Raquel Salvador
Sinopsi:

Dona blanca monologuista busca públic de ment oberta per a nit de rialles i el que sorgeixi. Es prega mínima discreció.

Coneixes Sil De Castro? Actriu, monologuista de professió i cabaretera de cor, còmica al canal Comedy Central, cabaretera habitual a El Molino de Barcelona, idiota professional allà on vagi…

Amb un humor fresc, descarat i gamberro, aquesta valenciana ens explica (sense pèls a la llengua) les seves aventures i desaventures des que va arribar a la Ciutat Comtal fins que va aconseguir conquerir l’escenari del seu teatre somiat: el mític El Molino.

Gaudeix d’aquest monòleg a cop de Cabaret amb “¡Mira mamá, soy Cabaretera!”

Crítica: Mira mamá, soy cabaretera

07/04/2019

Excelente monologo con Burlesque incluido

per Ferran Baile

Un feliz descubrimiento. No nació ayer artísticamente, pero reconozco que no la había visto aún actuar, Sil de Castro, actriz, cómica y creadora polifacética.

“Mujer blanca monologuísta busca a público de mente abierta para noche de risas y lo que surja”. Así se nos presenta en el programa esta actriz-monologuísta de profesión y cabaretera de corazón, que considera acertadamente el humor como “una arma de construcción  masiva”. Es una hora y cuarenta minutos, muy disfrutables en los que no paras de reír.  Dice las cosas por su nombre, con una frescura, un sano descaro y un saludable y complice tono gamberro. En ningún momento cae en la chabacanería, el humor fácil, ni en el chiste mil veces oído. Cuenta sus aventuras y desventuras, reivindicando sus orígenes valencianos, riéndose de sí misma y poniendo ante el espejo a la sociedad y a los hombres de mentalidad machista, con un mensaje claramente reivindicativo de la mujer y su ser y estar en esta nueva sociedad. Un humor inteligente, mordaz, reflexivo. Te invita a reir, a jugar, a disfrutar y a la vez a pensar. Monólogo en el que intercala magníficas parodias de burlesque, que nos muestran además a una buena bailarina de cuerpo dúctil y sensual. 

En El Molino comenzó hace un año, casi en período de pruebas, con su anterior espectáculo, Mamá, quiero ser cabaretera!, y no ha dejado de actuar, llenando en cada sesión, y dando lustre a un El Molino un tanto enmohecido que lucha por re-encontrar brillos pasados. Con Sil de Castro lo consigue. Ahora con su segundo espectáculo: Mira mamá! Soy Cabaretera!, lo borda. Además esta excelente cómica cuida el vestuario, las proyecciones audiovisuales que la acompañan, la música, las coreografías, incluso su muñeco fetiche, un almohadón con la imagen de El Molino, tejida por ella misma. Lo luce orgullosa, como una niña lo hace con su muñeca.

Cuenta con la importante colaboración en la dirección de Jordi Solé, maestro del mimo-clown, conocido artísticamente como Mr Di.  www.instagram.com/sildecastro

Sil de Castro, una artista polifacética

Actriz, cómica, bailarina, clown, guionista y animadora, nacida en Valencia. Desde el 2001 ha trabajado en  múltiples formatos escénicos, como teatro, animación, performace, teatro de calle, cabaret, cuenta-cuentos, café-teatro o stand-up comedy. En su trayectoria cabe destacar su participación como co-fundadora, actriz y guionista en la Cía. GochayLercha, con la que durante ocho años desarrollaron múltiples proyectos, en los que la comedia, la interacción con el público, la improvisación y la inmediatez, eran siempre el motor de sus creaciones. Otra de las etapas a destacar es  su colaboración con la cadena de tv Comedy Central donde trabaja como actriz y cómica desde 2014. Ese mismo año creó junto a la actriz Ana Yanini la compañía Las Sisters. En el 2016 presentó su primer espectáculo como compañía: Cabaretazo, que estuvo en cartel en El Molino de Barcelona, donde más tarde también participó en el VII Barcelona Burlesque Festival  y estrenó en el 2018, su último espectáculo Mira mamá, estoy en el Molino, que tras el éxito obtenido, llevó en octubre al teatro Aquitania retitulado como Mira mamá!, ¡Soy Cabaretera!, que se esta representando con continuas prorrogas en El Molino.

El difícil arte del monólogo, tan mediatizado últimamente.

Desde que el teatro existe, el monólogo ha estado siempre una prueba de fuego para el actor-la actriz. El-ella solo, desnudo-as escénicamente, desgranando un texto ante el público, en comunicación directa. En el género de la comedia ha estado una prueba obligada para todo comediante que se precie. Maestro de maestros, el gran Gila, de quien se cumple este año el centenario de su nacimiento, fue además innovador, tanto en el humor escénico como en el gráfico. Otro grande, Joan Capri, también creó un personaje y un estilo.

El programa televisivo el Rey de la Comédia dio alas desde hace años a este género, que sigue estando de moda y potenciado continuamente por la televisión llena la programación de muchos teatros. Mínima inversión, promoción (via televisión) asegurada y éxito de público, especialmente en épocas de crisis, como ahora, en las que la mayor parte del público solo quiere reír a toda costa y sin la menor exigencia.

Hay muchos, demasiados y no todos-as toman el humor, como lo que es, algo muy serio. Predomina la gaseosa, el llenar el tiempo con chistes, comentarios y ocurrencias pretendidamente graciosos.  Bastantes de ellos utilizando un humor grueso, de gusto dudoso, lleno de palabrotas, pero lejos, muy-muy lejos del humor corrosivo de otro maestro, Pepe Rubianes, que además era un buen actor.  Los hay ciertamente ocurrentes y con monólogos bien construidos, pero pocos con la inteligencia de, otro maestro, Andreu Buenafuente, además gran presentador y productor televisivo, o con la gracia personal de Dani Rovira, además notable actor cómico y con una vena dramática que pronto saldrá a flote.

Por esa razón es muy disfrutable y digno de mención el excelente trabajo de esta joven, inteligente y brillante cómica, actriz, bailarina y guionista, Sil de Castro.

No se la pierdan!!

texto: ferranbaile@gmail.com