Santa Maria de Cervelló, Sant Vicenç Ferrer, Sant Joan Baptista, Santa Eulàlia… Hasta 24 santas y santos en capillitas instaladas en calles y rincones de todo El Born descubrimos a ritmo de mákina en el fantástico y singular espectáculo ‘CSFCMMCAB. Ruta pel Santoral Exterior del Born’, creado por el artista barcelonés Marc O’ Callaghan. Una ‘rave’ urbana itinerante que sorprende a todos, también a los turistas y vecinos que se tropiezan con la cofradía de fieles a la caza de santos, como quien caza Pokémons. Seguimos como en una gincana los pasos -muy acelerados, mejor ir con bambas- del artista, que va arrastrando un sampler y cuando llega a cada imagen se para, le ilumina con una linterna y le dedica una breve versión electrónica de su correspondiente gozo –canto religioso popular-. Y de santo en santo, al ritmo de la música electrónica, recorremos a pie las callejuelas del Born. Genial.
Esta festiva procesión makinera parte de una larga y compleja investigación de O’ Callaghan, autor, director y compositor de la pieza. Su interés por la música y por la religión le llevó a estudiar hace ya un lustro las correspondencias simbólicas entre el folclore católico –los gozos- y la música mákina a partir del tratado ‘Armónicas’ de Claudio Ptolomeo, quien propuso una relación entre el ciclo del año y el diapasón griego. El resultado es, en resumen, que a cada santo, según su fecha de festividad, le corresponde una micro-nota. A partir de esta, O’Callaghan crea para cada imagen una secuencia de notas en estilo mákina, superponiendo la melodía de los gozos correspondientes. Un ‘virolai’, por ejemplo, para la virgen de Montserrat, a quien relaciona, por su celebración el 27 de abril, con un si, más 47 centésimas de tono. Los estudiosos de música lo gozarán aún más. El público recibe un prospecto con todo el santoral que se visita, su ubicación, la fecha de celebración y la micro-nota correlativa.
El proyecto formó parte del programa BCN Producció 2019-2020 del centro de arte La Capilla, donde O’ Callaghan, conocido en la escena underground musical, presentó, entre otras piezas, ‘La dècada coagular’, uno de sus múltiples proyectos dedicados a la experimentación sonora y la performance. Fruto también de su interés en busca de correspondencias ocultas entre las distintas capas de la realidad que le rodea, partía de los arcanos mayores del tarot para explorar las relaciones entre magia y ciencia, sexo y espiritualidad, cultura de masas y subcultura, a través de sonidos industriales y ritmos hipnóticos.
Ahora su nuevo trabajo, que ya se ha visto en rutas adaptadas a Tortosa y Vic, ha llegado a Ciutat Vella programado por el Centre de les Arts Lliure- Fundació Joan Brossa. La función se inicia en la sala con una clase magistral del creador barcelonés que deja boquiabiertos al personal y gozarán aún más los estudiosos de música. Son apenas 15 minutos donde explica con diapositivas su investigación y fórmulas, una compleja mezcla de armonía y matemáticas difícil de seguir. Ya en la calle, descubrimos, con la mirada alzada, capillitas, fornículos y baldosas devocionales en las que no habíamos reparado aun pasando muchas veces bajo ellas. Hoy, más que nunca, paseamos con la cabeza gacha, abducidos por los móviles o bien para esquivar los santos excrementos de los perros que sus amos se olvidan de recoger. Y nos perdemos un pasado espléndido que gracias a O’Callaghan podemos recuperar.
Con este magnífico proyecto, el artista ha querido rescatar una olvidada antigua tradición local: la de visitar capillas. Cuenta, citando el ‘Costumari Català’ de Joan Amades, que los ciudadanos salían tras la cena para verlas iluminadas y decoradas y les cantaban, si lo conocían, el gozo correspondiente. Cada capilla contenía el santo patrón de un gremio o un santo por el que tenían especial devoción los vecinos de la calle o del edificio. El creador catalán tiene también la versión de ‘Santoral Interior’, con rutas por la imaginería religiosa de las iglesias y ha publicado un CD con canciones en las que ha aplicado su fórmula compositiva a una selección de iglesias del Casc Antic de Barcelona. Un trabajo excelente que merece un largo recorrido por los conjuntos iconográficos de cualquier lugar.
